Para el comercio, el Día de la Madre es uno de los grandes picos de ventas; por ello, los consumidores deben estar atentos a que su euforia no los lleve a cometer algún atentado contra el bolsillo.
Si aún no ha comprado el regalo, tome en cuenta las siguientes recomendaciones:
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Vaya con tiempo. Si se espera a último momento, está más propenso a comprar algo a la carrera y tomar una decisión equivocada. Nada más basta con ver las caras de las personas el 14 de agosto después de las 6 p. m., prácticamente decididas a llevarse lo que sea sin meditar mucho.
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Compare precios. Agosto es una época de mucha competencia entre los comercios. A lo mejor puede encontrar el mismo artículo más barato. Incluso algunos establecimientos tienen la política de igualar o mejorar precios. Lo importante es que saque el rato, camine y, en caso de duda, pregunte a sus amigos.
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Evite endeudarse. La primera gran tentación se llama tarjeta de crédito. Recuerde que si no paga la tarjeta de contado, esa compra se va a convertir en un préstamo por el cual deberá seguir pagando una cuota cada mes y con intereses, por lo general, muy altos.
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Si del todo no puede evitar endeudarse (y termina usando la tarjeta o el sistema de financiamiento de la tienda), al menos averigüe bien cuál es la tasa que le están aplicando y cuánto va a terminar pagando por ese producto. Si se trata del sistema de cuotas de la tienda, es probable que al final del plazo termine pagando casi el doble.
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Lea cuidadosamente la garantía y conserve la factura. Este documento es indispensable para cualquier reclamo posterior.
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Haga valer sus derechos como consumidor: el comercio le tiene que informar con total claridad sobre las características del producto, la forma de ejercer la garantía y las condiciones del crédito (si la venta es a plazo). Pero usted también debe involucrarse activamente: pregunte, aclare dudas y compare. Por eso retomamos uno de los primeros consejos: vaya con tiempo. En materia de finanzas, hacer las cosas a la carrera suele llevar a problemas.
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El consejo más importante de todos es que compre regalos que se ajusten a su realidad financiera y su presupuesto. Cualquier mamá va a agradecer más el gesto que el obsequio en sí. Además, hay regalos muy valiosos que se pueden dar todos los días, como el tiempo y las atenciones, que no le van a dejar un costoso hueco financiero.
Fuente: Algunas de estas recomendaciones son emitidas por el Ministerio de Economía, Industria y Comercio
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